Aunque el crowdfunding ya no es un desconocido en España, todavía hay mucha tarea de evangelización pendiente para que esta herramienta de financiación alternativa se expanda y forme parte del día a día de la finanzas de cada vez más empresas e inversores. Las perspectivas de cara al próximo año son realmente optimistas, algo que no solo refrenda la opinión de un nutrido grupo de expertos, sino que ha quedado reflejado en informes elaborados por reputadas universidades y firmas de consultoría de dilatada trayectoria. Los préstamos colectivos están en la hoja de ruta de promotoras y ahorradores dispuestos a dar el paso y evitar perder poder adquisitivo. En CIVISLEND también apostamos por un 2022 con el crowdfunding inmobiliario como protagonista, y estas serían las razones.
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Porque las promotoras buscan financiación alternativa
La demanda de nuevas residencias ha tomado impulso a lo largo de este año. Es cierto que parte de la misma viene representada por compradores que paralizaron su proceso de adquisición debido a la pandemia. Sin embargo, este apetito se está alimentando de personas que quieren hacer frente a la escalada inflacionista poniendo sus ahorros en marcha, y tener un inmueble en propiedad es una apuesta por un valor refugio. Sin duda, los bajos tipos de interés están ayudando a remarcar el alza en las transacciones.
En este contexto, las empresas promotoras españolas tienen sobrado músculo para seguir iniciando vivienda en 2022. Los promotores son conscientes de que pueden tener unas cuentas más saneadas fomentando la diversificación de sus fuentes de financiación. CIVISLEND no es partidario de que entre bancos y plataformas de financiación participativa exista una fractura insalvable, sino que queremos construir una sinergia con estas entidades tradicionales. Para sacar adelante un proyecto inmobiliario, combinar ambos recursos resulta mucho más ventajoso en todos los sentidos.
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Porque la rentabilidad de otros productos de renta fija no es atractiva
Atrás quedaron los grandes rendimientos de los depósitos bancarios. Este producto cuenta con un fuerte arraigo porque se basa en la remuneración fija del ahorro, sin complicaciones ni sobresaltos. Sin embargo, la banca lo ha ido retirando de su oferta debido a que la política expansiva del Banco Central Europeo hace muy difícil mantener estas remuneraciones sin que sus márgenes se vean afectados y sin tener que subir comisiones que sirvan para compensarlo. De hecho, los intereses de los depósitos no solo son exiguos, sino que algunas entidades han comenzado a cobrar por mantenerlos para aquellos clientes de escasa vinculación.
Otro producto de renta fija que está cayendo es la deuda pública, cuyas rentabilidades tanto a corto como a medio incluso son negativas, mientras que a largo, dan un retorno que es complicado defender teniendo en cuenta su escasa liquidez. En en este marco en el que el inversor se vuelve hacia el crowdlending. Los préstamos colectivos proporcionan una rentabilidad muy por encima de la media de la renta fija, y siempre y cuando el originador de la deuda sea una empresa con trayectoria y el proyecto esté calificado con un rating de calidad, la seguridad en ellos facilitará que las plataformas cuenten con mayores aportaciones.
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Porque se trata de un proceso muy sencillo
Invertir es algo a lo que muchos tienen respeto, y en algunos casos, hasta miedo. Más allá del peligro de perder dinero, está el proceso en sí, que para aquellas personas sin una base sólida de conocimientos financieros resulta lleno de aristas. De entre todos los productos financieros existentes, el crowdfunding de préstamos es uno de los más fáciles de comprender. Además, las plataformas son transparentes y siempre exponen de forma clara toda la información relativa a los proyectos. Por otra parte, las promotoras se encuentran ante una herramienta valiosa cuyo funcionamiento no tiene secretos y que es mucho más ágil que otros métodos de financiación.
Darse de alta y comenzar a operar en una plataforma de financiación participativa como CIVISLEND es realmente fácil, tanto para los promotores como para los inversores. Tras el aporte de determinada documentación, tanto solicitar un préstamo como aportar fondos al mismo son acciones que se desarrollan siguiendo unos pasos definidos. Además, en caso de que surja cualquier tipo de duda, el equipo de CIVISLEND está a plena disposición del usuario.
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Porque la economía colaborativa es una tendencia sólida
Hemos asumido las interacciones que tienen como marco el medio digital como parte de nuestra cotidianeidad. En este sentido, la pandemia ha servido de acelerador de la digitalización, colocando a inversores y promotores frente a la pantalla. Los hábitos de consumo han experimentado un cambio radical, y las finanzas no son ajenas a esta revolución. Las actividades económicas que tienen lugar online abren todo un mundo de posibilidades para cualquier negocio.
Además, en lo que respecta a modelos disruptivos como el crowdlending, la desconfianza inicial y la incertidumbre regulatoria han dado paso a un entorno colaborativo muy productivo, amparado bajo una normativa que define y delimita los roles y unas entidades supervisoras que garantizan que no estamos ante peligrosos chiringuitos financieros. No debemos olvidarnos de hitos recientes como la normativa europea sobre crowdfunding o el sandbox regulatorio puesto en marcha en España.
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Porque la construcción residencial vive un gran momento
La crisis sanitaria apenas ha tocado al sector inmobiliario, mientras que el pinchazo de la burbuja inmobiliaria en 2008 ha quedado completamente en el pasado. El sector inmobiliario es más fuerte que nunca a juzgar por indicadores clave como los precios, que seguirán subiendo, al menos, al mismo ritmo que la inflación. Los expertos pronostican que los precios suban entre un 3% y un 4% en 2022. Por su parte, se espera que las compraventas oscilen entre las 450.000 y las 500.000 operaciones.
En cuanto a los visados de obra nueva, entre julio y septiembre, se han visado 27.292 viviendas nuevas, lo que arroja un incremento del 14,1% frente al mismo periodo de 2019, según datos del Consejo Superior de los Colegios de Arquitectura de España. La previsión para 2022 es que estos visados continúen por la senda del dinamismo, al tiempo que los desarrollos de nueva planta se sitúen en cifras prepandemia, alcanzando las 100.000 unidades de vivienda nueva terminada anuales.