La reciente irrupción del crowdlending en España como un nuevo vehículo de inversión rápido, eficaz y trasparente ha supuesto la apertura del mercado inversor hacia el pequeño ahorrador y, por tanto, la oportunidad de que cualquier ciudadano gestione sus fondos cómodamente en un entorno online. A pesar de su carácter emergente, la eclosión de Plataformas de Financiación Participativa (PFP) que operan bajo este modelo de negocio se ha convertido en una nueva realidad que complementa la actividad convencional de las entidades bancarias y simplifica los procesos financieros del día a día.
Aunque esta herramienta de inversión ha despertado todo tipo de impresiones, lo cierto es que este mercado presenta grandes perspectivas para los próximos años. Su enorme potencial se ha trasladado en forma de startup al mundo de los negocios con la revolución del ecosistema FinTech. La industria de las finanzas ha visto como surgen iniciativas empresariales que aplican las múltiples posibilidades que alberga la tecnología disruptiva con la finalidad de acercar el mundo financiero a los usuarios digitales. En definitiva, con la productiva unión de ambas se ha desarrollado un canal más por el que el internauta puede gestionar sus finanzas a golpe de click.