Antes de comenzar a operar en el entorno de las plataformas dedicadas a los préstamos a particulares o a empresas, hay que fijarse unos objetivos SMART de inversión en crowdlending. La razón es muy sencilla: sin unas metas bien definidas es imposible crear una estrategia eficaz. Si vamos a tomar este negocio en serio para optimizar nuestros ahorros, es esencial responder a una serie de preguntas básicas que van desde cuánto dinero invertir y con qué frecuencia lo haremos hasta a qué tipo de proyectos voy a dirigir mi atención y qué voy a hacer con la rentabilidad que generen mis fondos, si retirarla o volverla a invertir, por ejemplo.
Los objetivos SMART de inversión en crowdlending te ayudarán a tener una visión más amplia de tu situación financiera y de su evolución, además de ahorrar tiempo
A la hora de plasmar nuestros objetivos, S.M.A.R.T. es un acrónimo que puede ayudarnos. Se trata de una regla mnemotécnica acuñada por George T. Doran a principios de los años 80. Desde entonces, se ha empleado de forma habitual en el mundo de la empresa, sobre todo, en los campos de la gestión de proyectos y el marketing, aunque también se aplica al desarrollo personal y, por supuesto, al mundo de las finanzas. Lo que busca esta organización inteligente de metas es que estas sean eficaces, y para eso deben ser realistas y establecer prioridades. Además, aporta una visión más amplia de tu situación financiera, aumentando tu capacidad de reacción, ya que se tiene bajo control cada paso y no se deja nada al azar. También redunda en un ahorro de tiempo y esfuerzo. Apostando por esta metodología te aseguras que no vas a rendirte a las primeras de cambio, ya que puedes ir viendo como se van cumpliendo fases con éxito.
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S -> Specific = Específico
Nada de abstracciones. Concretar es la clave. Es necesario marcarse una cantidad concreta que quieres conseguir, ya sean 250 euros o 10.000 euros. No vale con tenerla en la cabeza, hay que escribir esta cifra para tenerla bien presente. En ocasiones, cuesta pensar en el ahorro en términos numéricos, pero hay que abandonar el terreno de lo ambiguo y darle forma al clásico «vivir de las rentas» con el que todo el mundo sueña. Esto es solo una idea y debes moldearla hasta casi hacerla tangible. La independencia financiera solo se consigue por medio de la planificación. Además de marcarte una meta, debes escoger las herramientas que te servirán para alcanzarla, en nuestro caso, las plataformas de financiación participativa en las que invertirás. Como ves, no es una tarea sencilla, ya que necesita de un estudio previo y cierto análisis. Contar con una sólida cultura financiera de base es fundamental.
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M -> Measurable = Medible
Además de estar perfectamente delimitados, es fundamental que podamos medir los objetivos de inversión que nos propongamos. En este sentido, tendremos que familiarizarnos con el uso de las hojas de cálculo para saber en todo momento lo que vamos consiguiendo según vayamos invirtiendo. De este modo, será muy fácil determinar en qué punto estamos, si nos falta mucho o poco para lograr ese ahorro concreto que nos hemos marcado. Sin unos valores cuantitativos es imposible saber si estamos progresando o no. En Internet encontrarás plantillas en las que registrar todos los movimientos que realices. Estos archivos de Excel han sido creados por inversores que, como tú, decidieron subirse a la ola del crowdlending y darle un impulso a sus ahorros a través de este vehículo de inversión.
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A -> Achievable = Alcanzable
Tener ambición es primordial, pero las aspiraciones económicas deben ir en línea con la situación financiera de cada uno. No se puede pretender ahorrar un millón de euros invirtiendo 250 euros al año, ya que es probable que se necesiten varias vidas para conseguirlo, pero debes ser coherente con tus recursos propios y no gastar lo que vayas a necesitar en un corto espacio de tiempo. Nuestros propósitos deben ser realistas y ajustados a un plazo ni demasiado corto ni demasiado largo. Es esencial que visualices el tipo de interés de los proyectos y el tiempo en el que estará inmovilizado tu capital. Dibuja varios escenarios: uno de máximos, en el que la rentabilidad se logre; otro de medios, en el que haya retrasos; y otro de mínimos, en el que préstamo sea a pérdidas. Cuanto más afinemos en este punto, más motivados estaremos, aprendiendo de los errores y celebrando cada acierto.
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R -> Relevant = Relevante
Ya has determinado qué cantidad quieres conseguir y tienes claro que es razonable pero, ¿sabes también cuál es el fin último de ese ahorro? Detrás del dinero que obtendrás gracias a la rentabilidad que te genere el crowdlending hay algo que te importa aún más: pagar la entrada de una vivienda, comprar un coche, estudiar un máster, etc. Se trata de ponerle nombre y apellidos a esos beneficios. De esta forma, tu objetivo adquirirá mayor relevancia, dado que podrás visualizar más claramente tu meta final. Esta inicial también se traduce en ocasiones como realista, algo en lo que ya hemos insistido. Por otro lado, para que un objetivo financiero sea válido tiene que encajar con lo que te rodea, estar aprobado por el estilo de vida que has elegido. Obtener ingresos pasivos a través del crowdlending debe alinearse con tus valores, es decir, debe hacerte sentir cómodo y tranquilo.
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T -> Time = Tiempo establecido
Cualquier objetivo financiero debe estar limitado en el tiempo. Hablamos del horizonte temporal del crowdlending. No sólo es necesario ponerle una fecha tope a la fase final, sino a todas las intermedias. De esta forma, nos obligamos a estar pendientes de cómo van nuestras inversiones para corregirlas y redirigirlas. Cuando existe un firme compromiso temporal, el esfuerzo se redobla de forma casi automática, ya que habrá momentos en los que tendremos que tomar decisiones importantes respecto a nuestros préstamos para alcanzar nuestros objetivos. Cuando se accede a marketplace de una plataforma como CIVISLEND, los tiempos se expone de un modo muy claro, dado que se establece cada cuántos meses se cobrarán los intereses y cuándo se recuperará el capital inicial. De este modo, es muy sencillo para el inversor calcular tanto qué cantidad de dinero debe destinar como en cuántos proyectos debe invertir para lograr sus objetivos en un tiempo determinado.